Existen ciertas actividades para niños con problemas de conducta que pueden ser de gran utilidad para que su capacidad de aprendizaje mejore de manera exponencial, ayudándolos con ello no sólo en la escuela sino en la vida en general.
A continuación, te compartimos cinco de las más recomendables:
Instrucción diferenciada
A través de este enfoque, los maestros pueden modificar no sólo lo que lo que necesitan aprender los estudiantes, sino la forma en cómo lo aprenden y cómo lograr que puedan comprenderlo. En los casos en donde un niño tiene complicaciones en alguna área en específico, los maestros deben crear un plan que contemple practicar más, ofrecer instrucciones más detalladas y tareas especiales.
Andamio cognitivo
El método del andamio cognitivo consiste en la división del aprendizaje en partes más pequeños de lo usual. A su vez, cada una de las partes debe apuntar a un objetivo claro y seguir un orden lógico. Es labor de los maestros crear un puente que conecte todo lo que los alumnos ya sepan con aquello que no puedan realizar por ellos mismos. A estos puentes se les conoce con el nombre de “andamios”, dando origen al nombre del método.
Los andamios no sólo son enunciados, sino que pueden estar construidos por dibujos, tarjetas con anotaciones y gráficos. Es habitual que los maestros recurran al andamio cognitivo mostrando un modelo de trabajo de gran calidad, para más tarde solicitarle a sus estudiantes que trabajen en el suyo. Y, justo como sucede con los andamios en la construcción de edificios, estos son removidos por completo cuando ya no son requeridos.
Organización gráfica
Aquí el maestro debe realizar un dibujo con el fin de organizar ideas y pensamientos. El método de la organización gráfica suele ayudar a los alumnos más jóvenes en diversas actividades, como por ejemplo para identificar personajes de una historia leída con anterioridad.
Otro aspecto en el que los ayuda, es en la planificación y la organización necesaria para escribir su propio cuento.
Mnemotecnia
Los estudiantes emplean frases especiales para ayudarse a sí mismos a recordar cierta información. Se trata de una estrategia que puede ayudar al menor a incrementar su vocabulario. A manera de ejemplo, un niño es capaz de aprenderse de memoria el nombre científico del gato, “Felis catus”, utilizando la como palabra clave “feliz” ubicada junto a una foto que muestre a un minino jugando.
Instrucción multisensorial
Como última de esta serie de actividades para niños con problemas de conducta que mejoran su aprendizaje tenemos la instrucción multisensorial. Ésta consiste en conectar lo que los menores ven, con lo que escuchan, lo que lo sienten y cómo se mueven. Cuando un niño o un joven aprende a utilizar al máximo todos sus sentidos, le es más fácil recordar.
