Trastorno de ansiedad generalizada: tratamientos más comunes

Como su nombre sugiere, en "Trastorno de ansiedad generalizada: tratamientos más comunes" te hablamos de los medios mayormente utilizados en casos de TAG
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El trastorno de ansiedad generalizada, o TAG por sus siglas en español, es una afección mental. Quien sufre de TAG, recurrentemente se muestra preocupado o ansioso sobre distintas situaciones. Esto incluye también ocasiones en las que la causa de la ansiedad no es del todo clara.

Ahora bien, ¿en qué consiste su tratamiento? La realidad es que esto dependerá de cada caso en particular, así como del especialista en cuestión. Para determinar el tratamiento a seguir, es necesario conocer qué tanto afecta el trastorno la capacidad del paciente en su día a día..

Dicho lo anterior, son dos los principales tratamientos que existen para el TAG. Uno de ellos es la psicoterapia, conocida como terapia psicológica o terapia conversacional.

Trastorno de ansiedad generalizada: tratamiento de psicoterapia

La psicoterapia, conlleva un trabajo profundo dirigido por un terapeuta, cuyo fin es reducir los síntomas provocados por la ansiedad. La terapia cognitivo conductual resulta la forma de psicoterapia de mayor efectividad para el TAG.
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Siendo de corto plazo, este tratamiento se concentra en enseñar habilidades para manejar de manera directa las preocupaciones. También, auxilia al paciente a abordar nuevamente, poco a poco, las actividades que ha venido evadiendo por la ansiedad, Conforme se construye sobre el primer avance, la sintomatología va mejorando.

Trastorno de ansiedad generalizada: tratamiento con medicación

El otro tratamiento empleado consiste en el uso de diferentes tipos de medicamentos:

  • Antidepresivos:  Los tratamientos farmacológicos de primera línea, sin duda son los antidepresivos. Estos comprenden los inhibidores selectivos de la recaptación de serotonina, así como los inhibidores de la recaptación de serotonina y norepinefrina.
  • Buspirona: Este medicamento para la ansiedad puede utilizarse de manera continua. Como sucede con casi todos los antidepresivos, suele demorarse varias semanas en mostrar su máxima efectividad.
  • Benzodiacepinas: Recomendado en pocos casos, estos sedantes son recetados a corto plazo cuando la ansiedad es muy aguda. Su uso no se recomienda para quien ha tenido problemas de abuso de sustancias en el pasado, pues puede provocar adicción.

Sin embargo, es bastante común combinar estos dos tratamientos para realizar un plan integral. Algo bastante común también, es ir probando para saber con certeza cuál tratamiento funciona mejor en el paciente.

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