Vivir ansioso no es nada agradable, pero muchas personas no saben cómo controlarla o mejor aún, eliminar. A continuación te presentamos 10 técnicas para controlar la ansiedad que seguro te ayudarán a sentirte mejor, no sólo emocional sino también físicamente.
- Entender cómo funciona la ansiedad. La ansiedad no es otra cosa sino un mecanismo de supervivencia que se activa cuando el cerebro detecta situaciones peligrosas. Las sensaciones del cuerpo son normales, por lo que no resultan perjudiciales para el cuerpo, pues se trata de un mecanismo cuyo objetivo es salvarnos del peligro.
- Aceptar lo que está ocurriendo. Huir no es una opción. Es importante aprender a esperar el tiempo que sea necesario para que el miedo desaparezca; si decide huir, la ansiedad habrá ganado y continuará apareciendo.
- Respirar de manera lenta y profunda. Utilizar la respiración abdominal para relajarse tanto física como mentalmente para tomar el control de la situación, es una gran técnica para ayudar al organismo a equilibrarse y recuperar energías.
- Analizar correctamente las situaciones. Evita tener pensamientos negativos y ser catastrofista. Tratar de ver cada situación de forma neutral, sin lamentarte ni estresarte por lo complejo de una situación. Relájate, esfuérzate por seguir adelante, mira el lado positivo de las cosas y el simple hecho de saber que esto influirá en cómo te sientes, hará que de hecho te sientas bien. Algunas veces no puedes elegir lo que pasa, pero sí decidir cómo reaccionas ante ello.
- Di lo que sientes. Quedarte con sensaciones negativas, miedos y demás, hace que tu cuerpo funcione como una olla de presión; si no le quitas la válvula de escape, llegará un momento en el que explotes. No espere a que esto suceda, tratar de decir a menudo cómo te sientes, déjale saber a los demás tu sentir cuando aún es un malestar de baja intensidad.
- Evita saturarte de deberes. El día tiene solamente 24 horas, analiza bien tus quehaceres (trabajo, escuela, limpieza del hogar, tiempo para descansar y divertirte, etc.). no te cargues de cosas que no vas a poder hacer. Organiza y elige tus prioridades.
- Descansa. Parece algo básicamente, pero lamentablemente muchas veces no le dedicamos el tiempo suficiente. Prueba irte a dormir un par de horas más temprano en comparación a como normalmente lo haces durante un par de días. El momento en el que despiertes, ese es el tiempo que necesita tu cuerpo para descansar. No más, no menos.
- No busques soluciones rápidas. Entre las técnicas para controlar la ansiedad, el recurrir a sustancias adictivas (tabaco, alcohol, sustancias alucinógenas, etc.) o causarte daño a ti mismo de cualquier, son salidas fáciles y rápidas que a la largar sólo son más perjudiciales. Busca una forma sana y constante de eliminar tus problemas de ansiedad.
- Realiza actividades que disfrutes. Practicar algún deporte, jugar videojuegos, leer un libro o simplemente recostarte y escuchar música. Sea lo que sea que disfrutes, dedícale tiempo a lo largo del día. Entre más momentos agradables tengas, ¡más feliz será!
- ¡Actívate! El ser sedentario aumenta la ansiedad. Gasta esa energía extra que todos tenemos y realiza un poco de ejercicio; caminar, pasear por el parque, jugar con los niños, etc. Todo aporta y le hará bien a tu organismo tanto físicamente como emocionalmente.
