Cuando los padres parecen ya haber agotado todos sus recursos buscando educar a un hijo y convertirlo en una persona de bien, es común pensar recurrir a un internado. No obstante, es común que surja la inseguridad de sí es o no la opción qué estamos buscando, porque después de todo, ¿cómo es un internado? ¿Cómo se vive en estos lugares?
Tener estas y otras preguntas es normal ya que, después de todo, se trata de un hijo al que a pesar de la forma en que se esté comportando se le quiere, y por ende no se desea que sufra, sino simple y sencillamente que su comportamiento cambie para bien.
En un internado, los jóvenes viven con varios alumnos más en una casa de internado, pero a su vez, en cada escuela pueden existir varias casas de internado, aclarando que hombres y mujeres son alojados de manera separada.
En cada una de estas casas de internado, se encuentra por lo menos un padre que vive y es quien se encarga de cuidar a los internados y atender sus necesidades, siendo común que además se desempeñe como uno de los profesores de la escuela cumpliendo una doble función, lo que su vez les permite estar en constante comunicación con los jóvenes y ver su desarrollo.
Los internos más jóvenes suelen compartir un dormitorio o habitación con 6 niños, teniendo cada estudiante con su propio espacio para personalizar como guste –principalmente con fotos-, además de su ropero con candado para guardar objetos preciados. Este tipo de vida fomenta la convivencia con los demás y el establecimiento de lazos afectivos con los compañeros.
Por otra parte, se acostumbra que los internos mayores tengan habitaciones individuales o compartir solamente con otro estudiante más. Incluso hay internados que cuentan con baños y/o instalaciones para higiene personal privados.
Por último, pero no por ello menos importante, se debe hacer notar que la mayoría de las casas de internado cuentan con espacios comunes cómodos que pueden ser utilizados para distintos fines; socializar, ver un poco de televisión con los demás o simplemente, descansar un poco. Inclusive algunos tienen su propia cocina en la que los estudiantes pueden preparar un bocadillo. Ahora ya puedes tener una ide clara de cómo es un internado.
