El trastorno límite de personalidad (TLP), es una afección que se caracteriza por la inestabilidad y dificultad de regular emociones en la persona que lo padece.
Conocido también como borderline, se sabe que al menos 1.6% de la población adulta padece de este trastorno. No obstante, se estima que de contabilizar los casos no documentados, esta cifra podría ascender a 5.6%. De ellos, más del 70% son mujeres.
Lamentablemente, se sabe que anteriormente los hombres que sufrían de este trastorno eran mal diagnosticados. En reiteradas ocasiones, se confundía el TLP con el trastorno de estrés postraumático, o con depresión.
Conscientes de la importancia de identificar la sintomatología, es que creamos este artículo especial.
Trastorno límite de personalidad: síntomas
- Relaciones interpersonales que se van a lo extremo: En concreto, quien sufre de este trastorno tiende a idealizar y a devaluar al otro. «¡Estoy totalmente enamorado!» o «¡la odio con toda mi alma!».
- Esfuerzos exagerados: incluso furiosos, con tal de impedir ser abandonado por familiares, la pareja y/o los amigos.
- Una autoimagen errónea: La imagen de sí mismo está distorsionada y es inestable. Esto afecta el ánimo de la persona, su opinión, sus metas, y por supuesto, sus relaciones con los demás.
- Conductas impulsivas: Aquí se engloba cualquier acción realizada sin control de las emociones. El abuso de sustancias, la práctica de sexo sin protección y gastar excesivamente, son solamente unos ejemplos.
- Comportamiento suicida: Se incluye también la automutilación.
- Largos períodos de estados de ánimo intensos: Estar deprimido, irritable o ansioso durante horas, e incluso días.
- Sentimiento de vacío o aburrimiento duradero.
De manera adicional, tenemos los llamados síntomas disociativos. Se engloba toda falta de continuidad en acciones, pensamientos, recuerdos e incluso identidad. Tener una sensación de estar fuera del cuerpo
Habiendo leído «Trastorno de límite de personalidad síntomas», seguramente te interesará saber en qué momento deberías consultar a un médico. La respuesta es muy sencilla. ¿Presentas uno o más de estos síntomas? ¿Sí? Entonces lo que debes hacer es hablar con tu doctor, o bien, con un especialista en salud mental. Por último, te invitamos a que conozcas nuestro programa académico de escuela para jóvenes con problemas de conducta.